El exboxeador
puertorriqueño, aunque criado en Harlem, pereció después de que los médicos le
desconectaran de la máquina que le ayudaba a seguir con vida, ya que no había
esperanzas de que se recuperara del daño que le causaron los disparos que
recibió en la cara
El triple excampeón del mundo Héctor Camacho, reconocido con
el sobrenombre de ‘Macho’, no pudo sobrevivir al tiroteo que sufrió el pasado
22 de noviembre en los alrededores del peligroso barrio de Bayamón en la
localidad puertorriqueña de San Juan.
El retirado púgil, con edad de 50 años, sufrió dos ataques
al corazón en pocas horas dos días después del tiroteo, causado por los daños
del mismo, lo que no dejó opción a los médicos para que desconectaran la
máquina que lo mantenía con vida, para parar con ese sufrimiento del mismo
paciente y de los familiares.
El púgil puertorriqueño protagonizó grandes momentos para el deporte del noble arte en su país
Este es un caso más que saca a la luz las relaciones que
siempre han unido desde lo más profundo los mundos del hampa y el boxeo. No se
sabe, y ni siquiera se sabrá el motivo de dicha agresión. Lo único que se ha
podido aclarar después de todo esto es que el ex triple campeón del mundo se
encontraba en su coche aparcado en la calle, cuando dos asaltantes llenaron de
plomo el vehículo. El acompañante de Héctor murió al instante, mientras que el
exboxeador quedó gravemente herido. Según los médicos, la bala fracturó dos de
sus vértebras y se alojó en un hombro, dañando arterias que llevan sangre
al cerebro.
Y es aquí cuando se enturbia la trama del suceso. Al
conductor del vehículo, amigo personal de Camacho, la Policía puertorriqueño le
encontró una cantidad considerable de bolsas de cocaína en los bolsillos, lo
que hace que se le relacione desde los medios de comunicación con el mundo de
los narcóticos. Pero no es la primera vez que al ‘Macho’ se le relaciona con el
hampa de la droga. En febrero de 2011 ya salvó la vida en otro tiroteo,
posterior a un intento de secuestro. Esta vez, desgraciadamente, la suerte ha
sido diferente.
Este pugilista puertorriqueño nos deja un enorme legado,
destacando un combate contra el mexicano Julio César Chávez por el campeonato
mundial, que ha pasado a los anales de la historia por su dureza, su duración,
su calidad técnica y por la ambición que mostraron ambos peleadores hasta que
el árbitro dictaminó el fin del combate. Aquí Camacho sí pudo retener la victoria.
En cambio, en su segundo tiroteo seguro que hubiera deseado encontrarse en un
ring y pelear contra la muerte, al que seguro que noquearía en el primer
asalto.
Fuentes: www.rtve.es; www.elnuevodia.com